1 / Define el tiempo y la ruta
Al inicio, es mejor que empieces corriendo lento entre 10 y 15 minutos, dos veces por semana. Lo ideal es que alternes caminata con carrera para que tu cuerpo se acostumbre a este nuevo esfuerzo. ¡Un buen entrenamiento requiere dos o incluso tres salidas por semana! Poco a poco, irás viendo el progreso y podrás correr durante más tiempo.
También debes preparar un recorrido adecuado: en calles de tu colonia, alrededor de un parque, la ruta para llegar a la casa de tu mejor amigo… Además, si estableces puntos de referencia, sabrás si estás corriendo más rápido de lo normal o no estás en buena forma.