Ya sea por el simple gusto de socializar o como auto desafío, el pádel satisface cualquier necesidad: juega solo por convivir o para que sientas la presión del partido.
El pádel (que es una mezcla de squash y tenis), es el nuevo deporte de raqueta más popular. Y eso es sólo el principio, porque tiene muchas virtudes que responden a las necesidades de todos. Veamos cuáles son los beneficios.
Ayuda a mejorar la condición física, tanto si no practicas ningún deporte y quieres empezar a ponerte en forma, o si ya juegas a un nivel intensivo y buscas rutinas exigentes. El pádel puede definirse como un deporte aeróbico con un buen contenido anaeróbico, que ayuda a fortalecer tú corazón y a tonificar tus músculos.
Fomenta el desarrollo y el cuidado de tus aptitudes físicas como los reflejos, el equilibrio y la coordinación, en particular la coordinación mano-ojo.
Los distintos pelotazos en las ventanas o rejillas ayudan a desarrollar la atención y la capacidad de anticipación, ya que se aprende a leer las trayectorias de las pelotas.
Jugar pádel es muy agradable. El éxito del pádel se debe en parte a que es un deporte accesible y divertido para los principiantes, independientemente de su nivel técnico inicial. Por regla general, casi todo el mundo está capacitado para lanzar la pelota por encima de la red y puede empezar con buen pie en muy poco tiempo. Este aspecto no siempre se encuentra en otros deportes que requieren una mayor técnica.
Es una forma estupenda de socializar, ya que compartes la cancha con un compañero y dos contrincantes, con los que puedes forjar lazos personales y conocer a gente nueva que comparta tu pasión. La comunicación entre los dos jugadores es esencial.
"Jugadores de pádel que tienen la suerte de vivir de su pasión, a los que les encanta retar a amigos y colegas, y que aprecian la cordialidad después del partido."
Este consejo fue redactado en francés y traducido al español.
